sábado, 24 de noviembre de 2007

Emociones textuales



Random explica en su libro "las emociones desfasadas" que "las palabras mueven al mundo. No las acciones, que son movilizadas por las palabras. El lenguaje se refugia en la antesala de la realidad. Nada es más placentero que el texto convertido en fluidos desperdigados por tu cuerpo". (Random, 2005).

Para este autor las emociones están cubiertas y construidas de lenguaje. Nada escapa a la omnioptencia de las palabras. Enfadarse no es más que una sucesión exclavizada de este mecanismo. Enfrentarse a la impotencia que nos lleva adelantar que sin palabras, ni con palabras es imposible vivir sin ellas.

La inquitud del lenguaje renueve el sistema de relaciones afectivas en torno a nuestra espacialización de encontrarnos con el otro. De todas maneras, el ser humano se desenvuelve en estos meandros del lenguaje.

jueves, 9 de agosto de 2007

Enfados textuales


Los textos están enmarañados de caprichos, envueltos en turbulencias de catástrofes inofensivas de palabras. Tal vez el misterioso camino en el laberinto no esté mas hecho que de hojas descolgadas. Es necesario tirarlas al tacho y empezar de nuevo. Enojadas, ellas no dejarán de serlo: el arma desestibilizadora que tu cuerpo hecha frases hechas. Así de simple, los libros se convierten en expresión de las emociones.

lunes, 18 de junio de 2007

Libros rabiosos


¿Pueden los libros generar rabia?. ¿A quién?. ¿Al que lee?. ¿Existe algún libro que pueda manejar nuestros sentimientos, a tal punto de alterarlos? Como la rabia se transmite, la rabia ocasionada por la lectura también. Se me enceguecen los ojos, la mirada se me prende fuego al sacar la mirada de esa lectura que me enloquece. La furia me transforma. Dr. Jeckil y Mr. Hayde. Leo y me da rabia al constatar que soy solo más que dos personas. La que adora la lectura, y la que la detesta. ¿Hacia dónde voy?.

martes, 5 de junio de 2007